Fijan 300 mil pesos para libertad de ex director de Ingeniería Pesquera; "me siento maltratado"

*  Javier Marcial, miembro del Sistema Nacional de Investigadores precisó ante un juez: “no puedo permitir que mi nombre se dañe de esa manera.”

*  (Se pide a medios de comunicación NO plagiar las notas de Relatos Nayarit, por mínima vergüenza)

 

El ex director de la Escuela Nacional de Ingeniería Pesquera de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), identificado como Javier Marcial “N”, podrá seguir su asunto penal en libertad una vez que cumpla con una garantía económica de 300 mil pesos, según determinó un juez de Control este sábado por la tarde.

Lo anterior se decidió en la parte final de una audiencia en que la agencia del Ministerio Público de la Fiscalía General del Estado (FGE) presentó imputación por los probables delitos de ejercicio indebido de funciones, abuso de autoridad y peculado en agravio de la UAN y la sociedad.

Mientras tanto, el próximo miércoles por la tarde se celebrará la continuación de la audiencia para decidir si el académico es o no vinculado a proceso.

El juez explicó a Javier Marcial que si en estos días garantiza el citado monto y recupera la libertad, en ese momento deberá cumplir otras medidas cautelares, como son la prohibición de salir del país, además de que no deberá acercarse a instalaciones de Ingeniería Pesquera ni tener comunicación con testigos o el personal que ahí labora y con estudiantes de la misma.

Dado que la defensa particular reveló que desde el 16 de abril Javier Marcial se encuentra comisionado a la Unidad Académica de Agricultura, luego de separarse de la dirección de Pesquera, el juez precisó que no le restringirá sus actividades académicas ni de investigación, pero no podrá ocupar cargos directivos de ningún tipo en el que haya manejo de bienes públicos.

Y en caso de que sea vinculado a proceso, deberá presentarse a firmar cada 15 días ante la Unidad de Medidas Cautelares.

 

Con una docena de personas como público: familiares, amigos, maestros universitarios en la sala del Centro Regional de Justicia Penal en Tepic, se planteó la imputación y la solicitud de vinculación a proceso por parte de la representación ministerial con base en dos puntos centrales: el uso de una lancha de Ingeniería Pesquera en una cooperativa de pescadores en el municipio de Rosamorada, caso por lo que se encuentra en prisión preventiva justificada el subdirector Elifonso “N”, y el hecho de que se permitiera que en tanques del plantel hubiera diversas especies marinas, como tiburón y mantarrayas, que eran vendidas a acuarios por parte de Adolfo de la Paz Peña, quien no labora en la Universidad y declaró que los laboratorios de Pesquera le eran prestados, sin pago de renta.

La Fiscalía anunció un par de oficios a través de los cuales la Universidad negó contar con convenios respecto a la cooperativa para el uso de la mencionada lancha, y de los tanques para las especies marinas que, insistió la agencia ministerial, provenían de una pesca indebida.

También se hizo referencia a un par de cateos efectuados el 25 de febrero, y una serie de entrevistas.

 

Javier Marcial, quien fue aprehendido la mañana del viernes 28, aceptó rendir una declaración en la que, visiblemente conmovido, empezó por decir que es doctor en ciencias con nivel 2 del Sistema Nacional de investigadores (SNI), además de contar con casi 33 años laborados en la Universidad.

Añadió que ha sido premiado tanto en Nayarit como a nivel internacional, que su tesis fue la mejor en el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y que cuenta con calidad moral.

Recordó que en el 2017, al aceptar la dirección de Pesquera apenas contaba con 13 ó 14 estudiantes internados, mientras que ahora hay más de 30.

A solicitud del juez, que le pidió centrarse en los hechos materia de la imputación, el investigador consideró que hoy Ingeniería Pesquera es mucho mejor que hace años y que, respecto al citado Adolfo de la Paz, ni siquiera lo conoce.

Estimó que la problemática se originó porque hace unos meses la Universidad dio de baja a cuatro personas: “no por mi, yo no estoy facultado para correr a nadie, yo sólo informé las incidencias que se tienen que reportar, si no, yo sería responsable...”

El académico precisó sentirse indignado, “maltratado”, dañado moralmente, sintiendo que ese no puede ser su pago por tratar de hacer lo correcto.

“Salí al extranjero y regresé, no tengo por qué irme, no puedo permitir que mi nombre se dañe de esa manera.”

Contó que especialmente los últimos dos años han sido complicados por un padecimiento de salud que ha motivado varias cirugías e, incluso, lo obliga a trasladarse a la Ciudad de México cada mes o mes y medio.

A preguntas de su defensor, negó haber recibido algún beneficio económico por los hechos investigados por la Fiscalía, además de indicar que Pesquera cuenta con 12 ó 13 laboratorios y que corresponde al subdirector el control de los bienes.

El juez de Control explicó que la revelación del imputado de la facilidad que tiene para viajar fuera del país, es lo que motiva la prohibición para seguir haciéndolo mientras transcurre el proceso, situación que, por el contrario, podrá hacer dentro de México especialmente por la atención médica anunciada.

Según pareció deducirse, la narración de Javier Marcial sobre una enfermedad habría sido determinante para que no se le impusiera la medida de prisión justificada solicitada por la Fiscalía.

En la parte final, antes de solicitar reunirse unos minutos con familiares, el imputado agregó un “haremos todos los esfuerzos”, en referencia a la garantía que deberá presentarse para que recupere la libertad.