* Ex secretario de Movilidad espera resolución del Segundo Tribunal Colegiado, con esperanza de que le permita seguir juicio en libertad.
* (Se pide a medios de comunicación NO plagiar las notas de Relatos Nayarit, por mínima vergüenza)
Aunque entre el uno de mayo y el 20 de junio transcurrió más de mes y medio en que Luis Alonso “T”, ex secretario de Movilidad del Gobierno del Estado, cumplió con las medidas cautelares fijadas por una jueza de Control en la primera fecha indicada, lo que permitía enfrentar una causa penal en libertad, una resolución de un magistrado de la Tercera Sala Unitaria del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), el 20 de junio, cambió el sentido de las medidas y le giró orden de aprehensión.
De inmediato fue capturado por policías estatales.
A decir de la Sala Unitaria, validada por el Juzgado Primero de Distrito en Tepic al que recurrió el ex funcionario, el cambio de la medida de prisión preventiva justificada fue por considerarse el peligro de sustracción; es decir, que pudiera darse a la fuga por la pena que pudiera imponerse en caso de que sea encontrado culpable de diversos delitos, “aunado a que cuenta con los recursos económicos para realizar tal actuación.”
Se asienta que con la medida cautelar se evita, además de la sustracción, la obstaculización del procedimiento.
Luis Alonso ha buscado el amparo y protección de la justicia federal y, al no obtenerlo del Juzgado Primero, fue presentado un recurso de revisión ante el Segundo Tribunal Colegiado, reclamando la determinación de la Sala Unitaria. Pretende regresar a las medidas anteriores, en libertad.
Un aspecto que, se supone, tendría relevancia es que cuando la Sala modificó las medidas, Luis Alonso cumplía las fijadas el uno de mayo, como eran presentarse a una firma semanal, la garantía económica por 800 mil pesos, la prohibición de salir del estado y del país, y no acercarse a testigos y a la Secretaría de Movilidad.
Sin embargo, se explicó en la resolución, hubo una insuficiencia de datos para acreditar el arraigo del imputado, ya que no quedó acreditado que realmente tenga su residencia en un domicilio mencionado.
De igual forma, tampoco se acreditó que tuviera un trabajo o actividad productiva, además de considerarse que podía pasar largos períodos alejado de su familia, como fue el caso que estuvo de visita con una hermana por dos meses y 12 días, en la ciudad de Tecate, Baja California Norte.
Dado que Luis Alonso cuenta con pasaporte y visa vigente, la defensa intenta demostrar que lo anterior no motivó que intentara cruzar a Estados Unidos, mientras que para la Sala Unitaria y el Juzgado de Distrito, tales documentos aumentan el riesgo de sustracción.
El ex funcionario está vinculado a proceso por los delitos de ejercicio indebido de funciones, coalición de servidores públicos, tráfico de influencias, falsificación de documentos en general, falsificación de certificaciones, y usurpación de identidad.
En una parte del fallo, el Juzgado de Distrito destaca que la jueza de Control “en todo momento permitió el debate de las partes en la información que se pretendía ingresar a la audiencia, otorgando el uso de la voz, en réplica y hasta dúplica, cuando el debate lo permitía; es decir, cumplió con el principio de contradicción e igualdad entre las partes.”
Como en su momento fue informado en este espacio, la explicación vertida en el juicio de amparo 451/2022 coincide con lo citado el uno de mayo por la jueza de Control, y que motivó que decidiera la medida cautelar de firma semanal y garantía económica, en el sentido de que no fluyeron datos de que Luis Alonso hubiera sido citado por la agencia ministerial para responder por los hechos atribuidos, a propósito de irregularidades en más de 100 permisos de taxis.
Sin embargo, para la Sala Unitaria y el Juzgado de Distrito, se considera que hay peligro a sustraerse de la justicia y en la obstaculización del procedimiento.
En caso Luis Alonso, justifican riesgo a sustraerse de la justicia
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