* De manera unilateral y sin consulta mínima con el sindicato de maestros, el líder de los trabajadores Luis Manuel Hernández anunció la suspensión laboral hasta el pago del aguinaldo; en diciembre, fue él quien se oponía a la medida.
No bastó que el rector de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN) Jorge Ignacio -“Nacho”- Peña González anunciara que a más tardar el 20 de enero se pagará el 100 por ciento del aguinaldo, ni que este jueves se cubrirá el pago de la primera quincena de enero a jubilados y el viernes al personal activo.
Ello no fue suficiente para levantar el paro iniciado el lunes nueve. Y no bastó porque de la suspensión se apropió el secretario del Sindicato de Empleados y Trabajadores (SETUAN) Luis Manuel Hernández Escobedo, quien, si su argumento público es que se necesita mantener la presión al Gobierno Federal y al Gobierno del Estado con el paro laboral, este miércoles dejó constancia de que su decisión tiene otro destinatario: el rector Nacho Peña. Es éste a quien busca dominar.
La actitud de Hernández Escobedo fue reclamada por un grupo de estudiantes al grito de “¡no más paro, no más paro, no más paro!”, así como por numerosos maestros que más tarde se concentraron en las oficinas del Sindicato de Personal Académico (SPAUAN), donde se anunció que precisamente los docentes encabezarán una marcha en Tepic el 23 de enero, día en que los cerca de 30 mil estudiantes regresan a todas las escuelas de la Universidad.
Se preveía una complicada mañana de miércoles en la explanada de Rectoría.
“No tengo nada que esconder, inició el rector ante el micrófono. “Aquí estoy” y no abandonará el barco por fuerte que sean los problemas y la tormenta.
Habló de que, gracias a recientes gestiones con la Secretaría de Educación Pública (SEP), la totalidad del aguinaldo se pagaría antes del 20 de enero, no sólo el 50 por ciento.
Mencionó la creación de la Unidad de Fiscalización que pueda sancionar a quienes desvíen recursos universitarios. Insistió en la toma de medidas de austeridad. “No más opacidad”. “Quien no quiera trabajar, que se vaya, ya no los queremos aquí”.
Se pronunció por mantener la unidad para enfrentar “días difíciles. Se ocupa de todos”, y reclamó a quienes desde la comodidad buscan mancillar a la casa universitaria.
“Soy y seré respetuoso de la decisión” de los sindicatos, expresó en referencia a si se mantendría el paro laboral.
- ¿Cómo va la investigación? –gritó un hombre desde la multitud-.
- No soy el fiscal –contestó el rector-.
A continuación, el líder del SETUAN tomó el micrófono. Unos 25 hombres que hacían funciones de seguridad permanecían cerca de él, enfrente de estudiantes convocados por Aarón Noel Verduzco Beltrán, presidente de la Federación de Estudiantes (FEUAN). Estos formaban una especie de media luna frente al acceso de Rectoría.
Luis Manuel habló bonito del rector: le reconocía el esfuerzo desde que llegó al cargo; reclamó que pocos maestros participaron en el paro y anunció que minutos antes el SETUAN había acordado continuar el paro hasta que fuera pagado el aguinaldo:
- ¡No más paro, no más paro, no más paro!, -reaccionaron los estudiantes-.
- ¡Suelta el cargo, suelta el cargo! –se oían voces desde atrás de la concentración, aparentemente de maestros-.
El también diputado local por el PRD argumentaba que el paro unos días más no generaría un impacto mayor al semestre pero que, con ello, se mostraría la fuerza ante los gobiernos federal y estatal.
- ¡La Universidad no es tuya, es de todos, es del pueblo!. ¡No es tu negocio! –se escuchaba el reclamo-.
- ¡Universidad, Universidad, Universidad, no más paro, no más paro, no más paro! –repetía principalmente el grupo de la FEUAN-.
Aquí cabe mencionar el cambio radical de Hernández Escobedo respecto a su intervención en el Consejo General Universitario el pasado 16 de diciembre, cuando rechazó la propuesta de Carlos Muñoz Barragán, líder del SPAUAN, a favor del paro para presionar el pago del aguinaldo.
Ahora, apropiándose unilateralmente del movimiento, la postura de Luis Manuel tuvo un evidente destinatario: el rector Nacho Peña. Es el personaje al que busca impactar.
Y este miércoles, cuando Muñoz Barragán hizo uso de la palabra, fue abucheado por muchos y de manera prolongada, aparentemente por algunos maestros y por integrantes del SETUAN. Muñoz llamó a los docentes a concentrarse en las oficinas del SPAUAN y ahí tomar la decisión: “¡buuuuuuu!”, volvió a oírse.
El rector cerró su intervención: sin unidad será difícil enfrentar la grave situación que enfrenta la Universidad: “será muy complicado sacar adelante la institución. Si estamos divididos, más complicado”.
Concluida la concentración, Carlos Muñoz y numerosos maestros se trasladaron al edificio del SPAUAN, en tanto que, por separado, Nacho Peña, Luis Manuel Hernández y Aarón Noel Verduzco atendían a medios de comunicación. Cuando Hernández se movió, también lo hizo el grupo de cuando menos 25 hombres en torno a él que le daban seguridad.
Si bien Verduzco no tomó el micrófono –en razón presumible porque el aguinaldo sólo agravia a los trabajadores-, comentó que la Universidad cerrada no beneficia a nadie. Sí, dijo, los gobiernos no pueden tener oídos sordos frente a la problemática, e hizo un llamado a la unidad.
Recordó que precisamente el SETUAN y la FEUAN en diciembre se mostraron en contra del paro.
Con el paso de los minutos varias entradas a la UAN fueron cerradas.
El rector anunció que se tomarían medidas para adecuar el calendario escolar y no afectar a los estudiantes, en especial a quienes desde el lunes debieron ingresar a preparatorias y los de intersemestrales.
Mientras tanto, en el SPAUAN caló lo ocurrido minutos antes y en especial el protagonismo del dirigente del SETUAN al prolongar el paro sin una consulta mínima. Durante unas tres horas, muchos maestros tomaron la palabra, proponiendo diversas acciones. Al final, se acordó -contra lo que unos opinaban- sumarse al paro y realizar una marcha el lunes 23 de enero.
Marco Antonio Verdín, maestro de la Preparatoria 5, en Tuxpan, recordó que la idea original del paro fue de Carlos Muñoz, el 16 de diciembre, y que “el otro sindicato” –en referencia al SETUAN- se había opuesto.
Por su parte, Carlos Rea, ex candidato a rector, habló de que la reestructuración que necesita la Universidad debe ser “sin simulación”, porque o la UAN es rescatada o “se nos desbarata en las manos”.
Bernabé Ríos, maestro de Medicina, señaló la importancia de exigir a la administración central que ataque los problemas de raíz. Dijo que es impensable que “una universidad quebrada” sostenga la nómina de las escuelas de preescolar, primaria y secundaria que funcionan en el interior y bajo control del SETUAN. O que “una universidad quebrada” otorgue pensiones vitalicias a ex rectores; que “una universidad quebrada” tenga a personas con doble plaza o vuelva a contratar a jubilados.
“Luis Manuel Hernández Escobedo es uno de los personajes que más ha sangrado a la Universidad”, apuntó.
El ex rector Salvador Villaseñor precisó que la pensión que cobra no es como tal, sino por haber laborado más de 20 años en tareas administrativas. Y sobre lo sucedido minutos antes, consideró que el abucheo a Carlos Muñoz debería ser considerado un abucheo a todos los maestros. Además, dijo, “no fue espontáneo”, sino planeado.
“El abucheo contra Carlos Muñoz me indigna porque él me representa. No actuemos como ellos, que el SPAUAN asuma sus decisiones”.
Un maestro de Filosofía criticó la postura de Hernández Escobedo y habló de la necesidad de generarle un contrapeso.
Como muchos otros docentes, una maestra de Investigación y Posgrado habló de la pobre participación del SPAUAN como gremio. Eso si, añadió, cuando se trata de revisar la nómina para justificar el pago brotan maestros que ni siquiera conocen.
En ese escenario, el paro continuará hasta el pago del aguinaldo.