Un hospital psiquiátrico, deuda pendiente en Nayarit

* El tema de la salud mental se agudiza cada vez más y puede advertirse no sólo en personas en edad avanzada, sino también en jóvenes.

 

Durante la mañana de este lunes, un hombre en short, sin camisa y descalzo, deambula por la avenida Tecnológico a la altura de la colonia Ladrillera.

Visiblemente descuidado, sus pasos parecen llevar prisa y sin embargo conducen a la nada.

Horas antes, apenas amanece, a varios kilómetros de ese primer lugar, frente a la iglesia San Rafael en el fraccionamiento Ciudad del Valle, otro individuo avanza con lentitud, hablando para sí mismo o con alguien que no está a su lado.

Hace unos días, el número de emergencias 911 recibió un reporte acerca de un señor, enfermo mental, que se encontraba desnudo por la calle Paseo de Viena en Ciudad del Valle, afuera de una escuela primaria, por lo que se requería la presencia de alguna autoridad.

Más tarde el mismo sujeto fue visto a escasos 100 metros del colegio, aunque ya con un pantalón puesto, y sin dejar de hablar incoherencias.

El tema de la salud mental se agudiza cada vez más y puede advertirse no sólo en personas en edad avanzada, sino también en jóvenes.

Pero estas personas que deambulan por la ciudad en situación zombi parece que no existieran. Se les teme, se les saca la vuelta, y da la impresión que reparamos en ellos sólo cuando se ven involucrados en algún hecho de impacto: un atropellamiento, o bien si agreden a alguien más.

Para muchos es conocida la situación de una señora que en varias ocasiones ha atacado a conductores de vehículos y motocicletas en Tepic, lanzándoles botellas de vidrio. Hace unas semanas protagonizó uno de estos hechos por la calle 12 de Octubre.

Esta falta de atención en casos extremos de enfermedad mental sigue estando pendiente en Nayarit. Si ya de por sí se trata de una situación grave, y que podría avanzar por el consumo de drogas cada vez más potentes, a ello hay que añadir que no se cuenta con un hospital psiquiátrico en el estado.

Dado que muchas de las veces se tratan de individuos en situación de abandono en la calle, ha llegado a suceder que algunos elementos de policía los trasladan a las orillas de la ciudad o cerca de pueblos colindantes. 

La construcción de un hospital psiquiátrico continúa siendo una deuda pendiente.