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La búsqueda: como si fuera un soldado, un marino, un estadounidense

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* Es lo que debió suceder en Lagos de Moreno: hacer sentir a los criminales que debían liberar a los cinco jóvenes.

* (Se pide a medios de comunicación NO plagiar las notas de Relatos Nayarit, por mínima vergüenza)

 

Aunque parezca repetitivo, es importante recordar que en noviembre del 2021, en Zapopan, Jalisco, un grupo criminal privó de la libertad a dos elementos de la Secretaría de Marina, lo que generó una inmediata respuesta de búsqueda por tierra y aire. Unos días después los efectivos fueron liberados.

Para abril del 2022, en Puerto Vallarta, Jalisco, una subteniente y una sargento del Ejército Mexicano sufrieron el plagio a manos de sujetos armados, lo que nuevamente motivó un amplio operativo, con resultados favorables: las mujeres recuperaron la libertad.

Y en marzo reciente vimos un despliegue similar en Tamaulipas, a raíz de que cuatro civiles de Estados Unidos se vieron involucrados en una refriega, dos de los cuales murieron mientras que los otros –entre estos una mujer- salvaron la vida y pudieron regresar a su país.

Estos tres ejemplos muestran la importancia de la respuesta que debieran dar las autoridades cuando se presenta un hecho como el registrado en Lagos de Moreno, Jalisco, con la privación de los jóvenes Roberto Carlos Olmeda, Diego Alberto Lara, Uriel Galván, Jaime Adolfo Martínez y Dante Cedillo que, todo apunta, fueron asesinados.

Esta vez no supimos que sobrevolaran los helicópteros día y noche para intentar el rescate de las víctimas. No se hizo sentir presión a los criminales con la fuerza del Estado.

Han pasado muchos años que en México se sufre de estos hechos de desaparición de personas, de plagios y posterior asesinato, de matanzas, por lo que desde hace tiempo a la víctima mexicana se le debe buscar como si fuera un soldado, un marino, un estadounidense.

Pero ésos operativos aún no los tenemos para el ciudadano común. Es lo que debió suceder en Lagos de Moreno: hacer sentir a los criminales que debían liberar a los jóvenes.

En medio de todo esto, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló este jueves que no se disculparía por el chiste que pronunció un día antes, cuando se le preguntó respecto al caso de los cinco muchachos.

Aunque los periodistas reunidos el miércoles en la conferencia “mañanera” prácticamente gritaban por “¡los jóvenes!”, “¡Lagos de Moreno!”, “¡Jalisco!”, según se escucha en la grabación, el presidente soltó un chiste y un despiadado “no oigo”, con la mano pegada al oído, y sin dejar de sonreír.

Y este jueves, tras de que las críticas cayeron por esa respuesta insensible, López Obrador continuó por las mismas:

“Aclarar eso, no tengo porque ofrecer disculpas, porque fue un invento.”

Repitió que contó su chiste porque no había escuchado las preguntas sobre el caso de los cinco amigos, y culpó de ello a la prensa perversa y vendida.

Brutal lo sucedido en Lagos de Moreno.

Y en la correspondiente proporción, sin piedad el presidente.

 

 

 

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