“¡Es él!”

* La fuerza de la joven viene acompañada del apoyo psicológico para superar la situación. En aquellos días, mientras José Fernando no era detenido, se temía que la buscara nuevamente.

 

En las últimas dos semanas se realizó un juicio oral en el Centro Regional de Justicia Penal relacionado con un intento de feminicidio, ocurrido en octubre del 2019 en una colonia en Tepic.

La víctima, adolescente, tuvo diversas lesiones, algunas cortantes producidas con arma blanca.

El viernes siete este reportero presentó una nota sobre el caso, haciendo énfasis en las características del noviazgo, donde el imputado José Fernando “N” “N” tenía bajo control a la joven, aislándola especialmente de sus amistades. Incluso, aunque ella terminó la relación, él siguió acechando, y hoy se deduce que preparaba el ataque.

Como ya fue anotado en la información reciente, el control en el noviazgo es un aspecto del que debería estarse pendiente en las familias.

Cabe agregar que en un juicio oral se parte de cero, por lo que todas las pruebas, en contra o a favor del imputado, se presentan ante un Tribunal de Enjuiciamiento integrado por tres jueces que no conocen del asunto.

El viernes 14, la Fiscalía General del Estado (FGE) informó que el Tribunal encontró culpable a José Fernando por tentativa de feminicidio agravado, siendo condenado a 22 años más siete meses y 15 días de prisión.

 

Una víctima, los testigos, fotografías y demás, e incluso la versión de un imputado si así lo desea, son presentados ante el Tribunal.

El testimonio de una víctima suele ser determinante en un juicio. Pero puede llegar a ser tal el drama, el impacto de encontrarse con quien fue su agresor, que puede permitírsele estar en una sala diversa y tener a su lado apoyo profesional, por ejemplo cuando se trata de delitos sexuales.

La comunicación entre las salas es por audio y video.

Entre las múltiples preguntas que se hacen a una víctima es si reconoce al responsable y si puede señalarlo frente a los jueces.

Es de reconocerse la entereza cuando se pronuncia: “¡es él!”, y para que no quede duda hay una descripción de las ropas como va vestido.

La fuerza de la joven viene acompañada del apoyo psicológico para superar la situación. En aquellos días, mientras José Fernando no fue detenido, se temía que la buscara nuevamente.

El apoyo profesional a víctimas es uno de los muchos rubros tan necesarios; ojalá se fortalezca con más especialistas.

* Se pide a medios de comunicación NO plagiar las notas de Relatos Nayarit.