* En torno al ex diputado por el PRI se mencionan delitos como secuestro, abuso de autoridad, tráfico de influencias, tortura, en complicidad con el ex fiscal Édgar Veytia.
Al atardecer del 23 de agosto del 2017, en el Congreso del Estado se presentaron testimonios de agravio de abuso de poder acontecidas en el gobierno que concluía, de Roberto Sandoval Castañeda, y que involucraban a su ex fiscal General de Justicia Édgar Veytia.
El relato de la señora Yesenia llamó especialmente la atención de este reportero: lloraba, su cara temblaba, mientras describía aquellas horas en que, llevada por policías a la Fiscalía General del Estado (FGE) en compañía de su esposo Gerardo Montoya, fueron separados. Una mujer policía cumplió la orden de revisarla, mientras que un comandante pretendió fotografiarla para mostrar la imagen a Veytia. Ella suplicó que no lo hiciera.
Al mismo tiempo, Gerardo era torturado. Horas más tarde, Yesenia fue llevada a su casa para que recogiera las escrituras de una finca ubicada en el municipio de Bahía de Banderas. Veytia se quedaría con ella.
- ‘¡Mira hijo de la chingada, si usted dice algo, es hombre muerto!’ –recordó Montoya ante diputados la amenaza del fiscal.
Esta historia tiene relación con la orden de aprehensión cumplimentada la mañana de este martes en contra del transportista Carlos Alberto Saldate Castillón, ex diputado local por el PRI, a quien la Fiscalía le atribuye su probable responsabilidad en los delitos de abuso de autoridad, tráfico de influencias, y secuestro.
Aunque los datos ministeriales no han sido revelados, lo narrado por Gerardo Montoya ubica a Carlos Saldate como el siniestro personaje que proporcionó información a Veytia y éste ordenó la privación de la libertad de él y su esposa.
En la Cámara de Diputados contó que, tiempo antes, hubo acercamiento con Saldate puesto que éste le compró un terreno ubicado por la avenida Proyecto, pagándole un millón 136 mil pesos, más una combi de la ruta Tepic-Camichín de Jauja.
“Hermanito”, le empezó a llamar Saldate. Le dijo que era compadre de Veytia y un día lo llevó a platicar con él. Gerardo cometió un grave error: le habló al fiscal de su casa en Bahía de Banderas.
Montoya insistió que Saldate tuvo participación en la acción ilícita puesto que éste le había pagado más de un millón de pesos, y precisamente Veytia le exigía la entrega de un millón.
Según la narración del agraviado, cuando se le permitió hablar con su esposa, le pidió que buscara a Saldate, pero resulta que éste ya andaba por ahí, supuestamente abogando por ellos.
Que se conozca, en los últimos días el ex dirigente del PRI municipal no tramitó algún amparo.
Se confió, a pesar de que resultaba obvio que estaba en la mira de la Fiscalía, después de que la semana pasada se obtuvo de un juez la inamovilidad catastral de un terreno de más de seis mil metros cuadrados ubicado a un costado de la tienda Sams, en Forum.
Como ya lo explicó este reportero, se trata de una serie de delitos que sufrieron el señor José Cruz Corchado Partida y su hijo Víctor Hugo, éste último incluso secuestrado. La amenaza fue extrema para obligar la venta. Y nuevamente aparece el apellido Saldate.
Actualmente, el terreno –no puede venderse, traspasarse, u alguna otra- está a nombre de Adriana Saldate Castillón, hermana del transportista, a quien la agencia del Ministerio Público calificó como prestanombres de Veytia.
Ahora recluido en la penal de Tepic, Carlos Alberto Saldate traficó con el poder apoyado por el ex fiscal.
Otro ejemplo:
En febrero del 2014, un joven de 21 años, de nombre Daniel, que trabajaba como chofer de una combi con la ruta Guadalupe Victoria, municipio de San Blas, a Ruiz, se salió de carretera a altas horas de la noche, fuera de su horario de trabajo. No tuvo lesiones. Contaría que había ido a recoger unos kilos de camarón y de regreso tuvo el accidente, que dejó daños materiales. Agentes de tránsito se hicieron cargo.
Sin embargo, la situación se modificó. Daniel fue trasladado a Tepic, y unas 30 horas después del accidente, fue denunciado por el delito de robo de vehículo, situación que el muchacho siempre negó.
Para no variar, la combi estaba a nombre de Adriana Saldate Castillón.
Daniel estuvo en la penal de Tepic alrededor de dos meses. Según se conoció entonces, finalmente un apoderado de Saldate le otorgó el perdón.
(Saldate, diputado. Foto: Congreso del Estado)
* Se pide a medios de comunicación NO plagiar las notas de Relatos Nayarit.
Carlos Saldate, involucrado en historias siniestras
Typography
- Smaller Small Medium Big Bigger
- Default Helvetica Segoe Georgia Times
- Reading Mode