“Evitar que el sentenciado vuelva a cometer una atrocidad con cualquier mujer”

* A pesar de pruebas en contra, Israel decidió el juicio oral, evitando el procedimiento abreviado que le permitiría una disminución de la condena, fijada  en 35 años.

 

El viernes 17, un Tribunal de Enjuiciamiento impuso 35 años de prisión a un sujeto identificado como Israel “N” “N”, encontrándolo culpable de homicidio calificado en agravio de una mujer, por hechos registrados el 24 de septiembre del 2017. La víctima fue apuñalada en el baño de su casa del fraccionamiento Altavela, en Bahía de Banderas.

Algunas partes del juicio, que transcurrió durante casi dos semanas, fueron citadas en notas de este reportero.

Durante la audiencia de individualización de la sanción, la Fiscalía General del Estado (FGE) solicitó una condena de 45 años, mientras que la defensa particular pidió la pena mínima de 20 años.

Una agente ministerial habló de la necesidad de “evitar que el sentenciado vuelva a cometer una atrocidad con cualquier mujer”, agregando que se trata de un hombre de 39 años, con la edad suficiente para discernir entre el bien y el mal:

“Él sabía que cometía un delito, nada justifica su actuar.”

Además de los 35 años de prisión, Israel fue condenado por el Tribunal –integrado por los jueces Armando Elías Martínez, Amalia Martínez Martínez y José Sotero Lepe Velázquez- al pago de 211 mil 223 pesos por reparación del daño, así como los gastos funerarios.

Un aspecto que conviene señalar es la apuesta del acusado y su defensa por ir a juicio oral, a pesar del cúmulo de pruebas en contra, en lugar de buscar otra salida como el procedimiento abreviado, en el que si bien tendría que admitir responsabilidad en el crimen, estaría en posibilidad de negociar una disminución de la condena.

Basta recordar que horas después del asesinato, Israel condujo desde Bahía de Banderas un automóvil de la víctima y lo intercambió en Tepic por un vehículo Mustang.

Por otra parte, cabe añadir que la condena no está firme y seguramente será apelada para su estudio en una Sala Penal. Y luego quedaría el recurso del amparo.