* En edad productiva puesto que aún no llega a los 50 años, la Universidad es como un cuerpo que soportó de todo, al que desde muy joven lo llenaron de vicios, de excesos, de malos hábitos, y que en los últimos años empezó a dar señales de que no podía soportar más.
1.- Apenas ayer en Relatos Nayarit se precisó de un recurso de apelación interpuesto en septiembre por el Ayuntamiento de Tepic –aún en la administración pasada-, en contra de la Fiscalía General del Estado (FGE) que resolvió, un mes antes, el no ejercicio de la acción penal del ex presidente municipal de Tepic, por el PRI, Héctor –“El Toro”- González Curiel y la ex tesorera Marcia Ivette Bernal Mendoza, denunciados como probables responsables de los delitos de ejercicio indebido de funciones y peculado por poco más de 50 millones de pesos, no entregados al Patronato que administra el impuesto especial del 12% a favor de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN).
Con el fallo de la Fiscalía General, el mensaje que dejó el ex gobernador Roberto Sandoval Castañeda fue claro: un cinismo para encubrir al “Toro”, que jamás se sepa el destino que tuvieron esos 50 millones aportados por la ciudadanía mediante el citado impuesto especial y que no debieron tener otro destino más que la casa universitaria.
Ahora, la resolución combatida es estudiada por un Juzgado Penal de Tepic que, con base en los argumentos del Ayuntamiento de Tepic, decidirá si confirma la postura de la Fiscalía o la modifica con el fin de que González Curiel y la ex tesorera sean enjuiciados.
2.- Con el conocimiento de todos, el terreno del ex estadio de béisbol en Tepic tiene un proceso de venta para pagarse a la Universidad más de 70 millones de pesos adeudados por el gobierno estatal desde la época de Ney González Sánchez, que incumplió con el respectivo subsidio de financiamiento, según documentos universitarios. El adeudo original era de más de 100 millones no entregados por Ney, aunque una parte fue cubierta por la administración de Roberto.
Pero no ha pasado de ahí: los ex gobernadores, campantes.
3.- Durante 24 años fue indebidamente cobrado el sueldo de una profesionista que fue maestra de la Preparatoria 2, ubicada en Santiago Ixcuintla, pero que posteriormente se dedicó a otras tareas. ¡24 años!. ¿Y que ha pasado?: nada. Una denuncia más por ahí olvidada en la Fiscalía General.
4.- Ya repetitivo resulta que funcionarios universitarios clamen a los ayuntamientos la entrega de lo recaudado por el impuesto especial, desvío, por cierto, en que fue pionero Ney González en su época de alcalde de Tepic.
5.- El ex rector Juan López Salazar de plano recurrió a préstamos de particulares, a dinero de origen que se desconoce, para enfrentar la crisis y ahora se encuentra prófugo, como probable responsable de peculado.
La lista de agravios puede continuar e ilustran que la Universidad no tenía escapatoria: le esperaba el colapso y hubo mil razones para ello.
En edad productiva puesto que aún no llega a los 50 años, la Universidad es como un cuerpo que soportó de todo, al que desde muy joven lo llenaron de vicios, de excesos, de malos hábitos, y que en los últimos años empezó a dar señales de que no podía seguir así. Muchos le han fallado pero gozan de impunidad.
Conocido este miércoles el aviso de la Secretaría de Educación Pública (SEP) del Gobierno Federal al rector Jorge Ignacio Peña González, de que no podrá apoyar a la UAN y a otras universidades en su necesidad económica de fin de año, debido a la urgencia de recursos para enfrentar los dos temblores y un huracán, los distintos rectores firmaron una carta abierta dirigida al Presidente Enrique Peña Nieto, insistiendo en la ayuda financiera.
El deslinde del Gobierno Federal deja abierta la posibilidad para que el gobernador Antonio Echevarría García asuma un papel importante que apoye a la casa de estudios.
Pero mientras tanto, a quién culpar de esta crisis si a lo mejor todos, o casi todos, tenemos una parte de responsabilidad.
Mil razones que amolaron a la Universidad Autónoma de Nayarit
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