* Su papá agradece todo el apoyo moral que su familia ha recibido.
“Agradezco a toda la gente, a familiares, a los vecinos y amigos por todo el apoyo que nos han brindado, por sus oraciones y toda esa buena vibra para ir saliendo adelante”.
Así habla el señor José Rivas Godínez, papá de José Jannay Rivas Rodríguez, el muchacho que la madrugada del sábado 20 de julio conducía un automóvil tipo Polo que fue embestido por un vehículo Camaro manejado por un menor de edad, frente a la central camionera, un caso que atrapó la atención de la sociedad en general.
Maestro jubilado, Rivas Godínez habla unos minutos con este reportero en su domicilio de la colonia Menchaca; su hijo fue dado de alta del hospital San Rafael el sábado tres de agosto, aunque continúa bajo chequeo médico. Y así seguirá el tiempo que sea necesario, según el acuerdo firmado en la Fiscalía General del Estado.
Poco a poco –dice el jefe de familia-, José Jannay va tratando de regresar a su vida normal. Se le ve consciente, aunque aún con secuelas propias del fuerte accidente. Tuvo una operación en el maxilar.
José Jannay es estudiante de la Universidad Autónoma de Nayarit (UAN), donde hace dos meses terminó el segundo año de ingenierías.
Su papá explica que prácticamente diario van a visitarlo alguno o varios de los muchachos que lo acompañaban al momento del accidente –en el que lamentablemente falleció otro de los amigos-, animándolo para que siga echándole ganas.
Rivas Godínez indica que todo el apoyo moral que ha recibido su familia ha sido importante para enfrentar esta difícil situación.
(En la imagen el auto Polo que José Jannay conducía. Foto: cortesía)
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