* El reo Héctor Manuel Rodríguez fue consignado por la muerte de Pedro Natividad Ríos, registrada el lunes 29 de junio.
* Una hermana del ahora occiso resume: “Pedro era indefenso”. A ella nadie le explicó ni por qué estaba detenido.
Al final de la calle Golondrinas en la colonia El Faisán 2, está la casa donde vivía Pedro Natividad Ríos, el reo que falleció la tarde del lunes 29 de junio en la penal de Tepic.
En la humilde casa de dos cuartos vivían Pedro y una pareja a la que rentaba una de las habitaciones; la mujer le preparaba los alimentos. Pedazos de lonas cubren espacios de una barda chaparra, mientras en otro extremo hay un falsete.
Al mediodía de este lunes en el patio pudo verse un triciclo, periódicamente utilizado para la venta de elotes y otros productos. Y es que Pedro, quien en febrero pasado cumplió 53 años, no tenía un trabajo fijo. Ayudaba en tareas diversas para ganarse unos pesos.
Frente a la casa de Pedro continúa la prolongación de la calle Golondrinas y del otro lado pasa el río Mololoa. En esa zona fue detenido el viernes 26 por policías estatales.
A unos 300 metros de ahí, la señora Bertha Natividad trabaja en la preparación de cuatro pollos al carbón. Es la hermana mayor de Pedro. Le avisaron de su muerte el martes 30 como a las dos de la tarde, pero nadie le dio una explicación sobre por qué fue recluido en la penal de Tepic y por qué de su muerte.
Alguien le dijo, quizás a manera de consuelo, que quien provocó el deceso de su hermano pagaría con cárcel.
Acomodada en una silla donde le alcanza el humo del asador, comenta:
“Siempre ando a la cuarta pregunta –dice, en referencia a la falta de recursos-. No tenía para la funeraria y le hablé a otro de mis hermanos”.
A primera hora del miércoles uno, el cuerpo fue trasladado a Ixtapa de la Concepción, municipio de Compostela, y sepultado por la tarde en la tierra de nacimiento.
En el certificado de defunción que le fue entregado, se lee como causa del fallecimiento: “trauma profundo de tórax y abdomen”.
Bertha Natividad sabía que a su hermano le achacaban el robo de un rollo de alambre de púas y que este martes siete acudiría a rendir una declaración. Y resume: “Pedro era indefenso”.
FUE RIÑA, CONCLUSIÓN OFICIAL
Por estos hechos, la Fiscalía General del Estado (FGE) ejercitó acción penal en contra del reo Héctor Manuel Rodríguez Sánchez, como presunto responsable del delito de homicidio en riña, mientras que al también interno Juan Antonio Naranjo Ponce se le achaca encubrimiento, puesto que es responsable del área de enfermos mentales, donde ocurrieron los hechos.
Natividad Ríos había ingresado a la penal durante la noche del domingo 28, como presunto responsable de desobediencia y resistencia de particulares, un delito menor.
La decisión de llevarlo al área de psiquiatría de reos se habría tomado por supuestos actos violentos cuando se le requirió por el área de trabajo social. Hasta el martes 30 rendiría declaración preparatoria ante un juzgado.
Ventilada en audiencia pública la declaración de Héctor Manuel Rodríguez, justificó que fue agredido por Pedro Natividad en varias ocasiones y sin razón alguna, puesto que era la primera vez que se conocían.
Sin embargo, añadió, tuvo que defenderse y pelearon en varias ocasiones, siendo en la última de ellas en que Natividad Ríos quedó en el suelo. Ya no pudo levantarse. Para cuando fue trasladado a la enfermería de la prisión ya estaba muerto.
La versión de la riña ha causado extrañeza puesto que Natividad Ríos acababa de ingresar al penal.
El certificado de defunción puntualiza que el fallecimiento fue a las 2:30 de la tarde del 29 de junio, aunque fue trasladado al Servicio Médico Forense (SEMEFO) horas después.
(La casa de Pedro en la colonia El Faisán 2. Foto: Oscar Verdín/relatosnayarit)
* NO al robo de notas. Se pide a otros medios de comunicación abstenerse de copiar notas, párrafos, publicados en Relatos Nayarit.