* El ex magistrado del Tribunal Superior de Justicia es regresado a un cargo de primer nivel.
Entre el 30 de septiembre del 2010 y este 15 de agosto del 2016 transcurrieron prácticamente seis años en los que Jorge Armando Gómez Arias ha vivido diversas circunstancias: desde haber sido objeto de un intento de humillación por parte de magistrados del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), hasta volver a los primeros planos y tomar protesta como secretario General de Gobierno a los 71 años de edad.
“Hoy he decidido renunciar al cargo de SGG para dedicar tiempo a atender mi salud y a un tema personal como lo es mi separación”, escribió el saliente secretario General José Trinidad -“Pepe”- Espinoza Vargas, a través de Facebook, la red social que tanto le gusta, contrario al estilo discreto de su sucesor.
Eso si, ambos son notarios públicos. Gómez Arias ya debió haber solicitado licencia como notario, mientras que Pepe Espinoza tendrá la oportunidad de incorporarse a la notaría 37, con oficinas en calle San Luis 133A sur, en el centro de Tepic.
LA NOCHE QUE SE LE QUISO EXHIBIR
El 30 de septiembre del 2010 fue el último día que Jorge Armando Gómez Arias fue magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ); entre meses y un año antes habían llegado 12 magistrados impulsados por el ex gobernador Ney González Sánchez.
Esa noche de 30 de septiembre, ya designado presidente Pedro Antonio Enríquez Soto, fue evidente que durante la sesión pública del Pleno del TSJ se pretendió evidenciar a Gómez Arias, humillarlo.
Una crónica de este reportero describió así esos momentos, tras la votación de los 12 magistrados más recientes a favor de Enríquez:
“Hubo un momento en que Gómez Arias preguntó si había abstenciones, a lo que Manuel Salinas replicó que esa situación no lo prevé la ley. O se votaba a favor o en contra, dijo.
“Usted debe conocer muy bien la ley”, señaló, por su parte, -Rafael- Pérez Cárdenas, y le pidió que leyera varios artículos.
El ambiente ya era tenso. Hubo un silencio y parecía no haber forma de romperlo. Gómez Arias y Sergio Morán leían, allá al frente, y hablaban en voz baja.
Finalmente, el magistrado recordó que el voto de –José Guadalupe- Campos era en contra. Dijo entonces el nombre del nuevo presidente, aunque, nervioso, a veces lo llamaba como “Pedro Soto”, “Pedro Enríquez” o “Pedro Antonio Soto”.
Hubo aplausos y Enríquez Soto se puso de pie para agradecerlos”.
La sesión de esa noche continuó así:
“FALLIDO GOLPE
El siguiente punto de la sesión sería decidir la integración de todas las salas. Ya pasaba de las nueve de la noche.
Ismael González Parra pidió el uso de la palabra y lanzó un golpe seco contra Gómez Arias. Le dijo que ya no era el presidente del Tribunal Superior y, por lo tanto, debía cederle el lugar a Pedro Antonio Enríquez para que éste continuara el desarrollo de la sesión.
Pérez Cárdenas soltó tres, cuatro, cinco palmadas rápidas y fuertes, en aprobación de la iniciativa.
Se quería ver sangre, como dicen en el barrio.
Gómez Arias reaccionó: conforme a la ley, el nuevo presidente lo sería del uno de octubre del 2010 al 30 de septiembre del 2014. Y el 30 de septiembre del 2010 aún no finalizaba, respondió.
Y remató Gómez Arias contra González Parra, recordándole lo que se enseña desde niños: “el día tiene 24 horas”.
Nadie insistió más en el tema”.
VIENTO A FAVOR CON ROBERTO
De magistrado presidente del TSJ, Gómez Arias fue asignado en la Sala Mixta.
Pero a la llegada de Roberto Sandoval al gobierno fue evidente la cercanía de Jorge Armando. Su hija Liliana Gómez Meza primero fue directora del DIF estatal y ahora delegada de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL).
Incluso, volvió a figurar en el Tribunal Superior de Justicia, como presidente de la Sala Penal, un gesto de Enríquez para el gobernador.
Y todo siguió color de miel:
El seis de junio del 2013, el Congreso del Estado lo ratificó en el cargo para que concluyera el mismo el 27 de junio del 2015, al cumplir 70 años. Y así fue.
Con la designación del veterano abogado, el gobernador Roberto Sandoval Castañeda deja mensaje de que no encontró en su gabinete a un funcionario para ocupar la Secretaría General en los 13 meses que restan a su administración, aunque el estilo poco perceptible del nuevo titular hacen suponer que aumentaría el poder para tomar decisiones del fiscal General de Justicia Édgar Veytia.
La tarea inmediata de Gómez Arias ha estado en los últimos meses frente a Palacio de Gobierno: el plantón del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del Estado y Municipios (SUTSEM) en su reclamo por la toma de nota.
(El gobernador con Gómez Arias y Pepe Espinoza. Foto: Gobierno del Estado)