* La mamá que lloró y se hincó ante el secretario de Gobernación, solicitando ayuda para encontrar a su hijo, mostró un caso, pero cuántos más hay.
En noviembre del 2012, una joven contó a este reportero lo que en su familia se vivía tras la desaparición de su papá, un año antes. No sólo era el dolor, la incertidumbre sobre si estaba vivo o muerto, sino el que durante un tiempo fue precisamente la familia quien aportaba datos en la investigación y seguía pistas, pero no existía la misma prisa de las autoridades.
El asunto atrapó a todos en la familia Rodríguez. Cada vez que sabían de un cadáver encontrado, acudían al Servicio Médico Forense (SEMEFO) para verificar si se trataba de su familiar. Ver tantos cuerpos masacrados los llevó a tomar una decisión: ya no irían. Estaban enfermando. Se resignaron a no volverlo a ver.
Se trata de uno de los tantos casos de desaparecidos en el estado, un tema que resurgió con fuerza el viernes cinco cuando la señora Ana María Salcido, de 68 años, se hincó ante el secretario de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong para suplicar su ayuda y encontrar a su hijo Cristian Amadeo Salcido, de 39 años, desaparecido en mayo del 2014.
La señora se acercó al alto funcionario federal durante la intervención de éste ante cientos de indígenas, momentos después de la firma de un convenio de colaboración para promover una política de población intercultural con el Fondo de Población de las Naciones Unidas, se informó en un comunicado de prensa.
En las instalaciones de la feria en Tepic, Salcido mostró a Osorio una fotografía de su hijo. Lloró, se hincó y fue ayudada a levantarse por el propio secretario y el gobernador Roberto Sandoval, cuya esposa Ana Lilia López posteriormente trató de tranquilizarla, abrazándola.
Concluido el evento, el secretario de Gobernación escuchó a la señora y se comprometió a dar seguimiento al caso.
Originaria de Mazatlán, Ana María contó a reporteros locales que Cristian Amadeo fue privado de su libertad en el bulevar Colosio, cerca del DIF estatal, cuyo ilícito habría sido grabado por cámaras de un negocio en esa zona.
Según su narración y al igual que el caso de la familia Rodríguez, ha provisto a la Fiscalía General del Estado (FGE) de datos, líneas de investigación. Su ADN, dijo, está en la Fiscalía, seguramente para ser comparado en caso del hallazgo de cuerpos no identificados.
Ana Lilia López, esposa del gobernador, indicó que se prestará atención a la señora, solicitando a la FGE que se lance una alerta sobre la desaparición de Cristian.
Una media hora después, Osorio Chong ya se había retirado cuando Ana María Salcido salió de las instalaciones de la feria. Una funcionaria del DIF la tomaba de la mano. En ese momento aparentemente irían a la Fiscalía.
Con su iniciativa, la señora mostró dos cosas a rajatabla: el tema de los desaparecidos en Nayarit, y el hecho de que haya tenido que atajar al secretario de Gobernación para que se dé agilidad a su denuncia.
(Ana María con la foto de su hijo. Foto: Oscar Verdín/relatosnayarit)