* Rinden homenaje al comandante Juan Segundo Huerta y el agente Sergio Arturo Flores.
Fotografías grandes del comandante de la Policía Nayarit Juan Segundo Huerta Ávila y el agente Sergio Arturo Flores Hernández, fueron colocadas juntas, al pie de donde tomaron la palabra distintos funcionarios, en la explanada de la Fiscalía General del Estado.
Se les rindió homenaje después del fallecimiento de ambos, el jueves, en aguas del arroyo El Ermitaño. El general Jorge Alonso Campos, secretario de Seguridad Pública Estatal, explicó a los asistentes que Flores Hernández resbaló y cayó al agua, y que momentos después, al ver que no emergía, Segundo Huerta intentó rescatarlo, pero ambos murieron ahogados.
*
Los padres, esposas, hijos, hermanos, los amigos están ahí y es imposible contener las lágrimas cuando se da el último pase de lista. Cuando se pronuncia el nombre de Juan Segundo Huerta Ávila y cientos de policías responden: “¡presente!”. Cuando se escucha el nombre de Sergio Arturo Flores Hernández y, otra vez, “¡presente!” en la voz de tantos.
La banda de guerra de la Policía Municipal acompaña el homenaje.
*
El gobernador Roberto Sandoval reconoció el trabajo, la lucha, el esfuerzo de los policías fallecidos. Adelantó que un nuevo edificio de la Policía Nayarit llevará el nombre del comandante Huerta.
Añadió que enviará una reforma al Congreso del Estado para que de manera legal haya seguridad para las familias de los policías que todos los días luchan y arriesgan la vida, y que mueren en cumplimiento de su deber. Que haya honor y certidumbre para los buenos policías.
Sin citarlo por su nombre, Sandoval hizo referencia a su antecesor Ney González, quien, añadió, decía que no confiaba en sus policías, pero nunca les preguntó si ellos confiaban en él.
Finalmente, el gobernador pidió a Dios que abra la puerta a Juan Segundo Huerta y Sergio Arturo Flores, quienes contaban con 17 y ocho años de servicio, respectivamente.
*
Un grupo de mujeres policías condujeron los ataúdes con los cuerpos del comandante y el agente hasta el centro de la explanada. La bandera de México fue colocada sobre los ataúdes.
Jóvenes paramédicos prestaron ayuda a familiares de Huerta y Flores, agotados por la pérdida, y secándose unas lágrimas que no dejaron de brotar.
(Fotos: Oscar Verdín/relatosnayarit)