Juez federal niega amparo a Sulma Altamirano por delitos de tortura y tráfico de influencias

* Se considera que hay datos para presumir que la imputada influyó con el ex fiscal Édgar Veytia para la detención y tortura de su cuñado Miguel Ángel García.

 

El Juzgado Cuarto de Distrito de Amparo Penal en Tepic, ha negado la protección de la justicia federal a Sulma Rosario Altamirano Estrada, ex regidora del Ayuntamiento de Tepic y ex delegada de la Secretaría de Relaciones Exteriores, a quien se imputa su probable responsabilidad en los delitos de tortura y tráfico de influencias.

Según el fallo del juez del Poder Judicial Federal José Armando Zozaya Solórzano, en el número de amparo 1164/2019, los datos expuestos por el juez de control son suficientes para el auto de vinculación a proceso dictado a mediados de octubre pasado.

Lo explicó así:

“…se estima que en la determinación reclamada, adecuadamente se estableció que hasta el momento existían datos de prueba suficientes para establecer la existencia de los hechos que la ley señala como delitos de tortura y tráfico de influencias, así como la probabilidad de que la ahora quejosa intervino en su comisión, toralmente porque el hecho atribuido consiste en que probablemente a finales del mes de noviembre de dos mil catorce, la aquí quejosa solicitó el apoyo del fiscal Édgar Veytia, a fin de detener al tercero interesado Miguel Ángel García Pérez, así como incoar en su contra un procedimiento penal, de la misma forma, porque por instrucciones de ella, elementos policiales lo golpearon, además porque lo coaccionó a fin de que se declarara culpable, refiriéndole que lo iba a refundir en la cárcel, de lo que se tiene que dicha quejosa participó en los hechos con características de tráfico de influencias, así como de la tortura de que dice fue objeto la víctima.”

Y añadió:

“En esas condiciones, resulta incuestionable que los datos de prueba expuestos y posteriormente valorados por el juez responsable, contrario a lo argumentado por la quejosa, se estiman suficientes, cuando menos para la emisión del auto de vinculación a proceso materia de la presente litis y para demostrar la probable conducta delictiva desplegada por la quejosa Sulma Rosario Altamirano Estrada (…)

“Lo anterior es así, puesto que como ya se hizo mención, el estándar probatorio para acreditar los hechos delictuosos y la probable participación de la imputada en su comisión, para el dictado del auto de vinculación a proceso, no es tan riguroso como el que se exige para el dictado de la sentencia, por lo que, se estima que los datos que fueron presentados por el Ministerio Público, hasta esa etapa procesal, se consideran suficientes para sustentar la resolución reclamada, ya que en ella se precisaron la forma y condiciones en que se llevaron a cabo las conductas delictivas…”

 

Si bien debe insistirse que el auto de vinculación a proceso, o la negativa del amparo, no prejuzgan sobre la situación de Altamirano Estrada, el caso muestra una página negra de lo sucedido con el joven Miguel Ángel García Pérez, cuñado de Sulma, puesto que su esposa Gladys Denisse Altamirano Estrada falleció la madrugada del 28 de noviembre del 2014, por causas naturales, y sin embargo permaneció detenido varios días, sometido a torturas. Le fue inventado el delito de resistencia y desobediencia de particulares para justificar la reclusión en la penal de Tepic.

Con el paso del tiempo la situación de Miguel Ángel se tornó dramática: su salud decayó, necesitaba silla de ruedas y murió el 15 de septiembre del 2019, unas semanas antes de la detención de Sulma.

Miguel Ángel estaba por cumplir 32 años.

Esta semana se conoció que la imputada, identificada como persona de las confianzas del ex gobernador Roberto Sandoval Castañeda, presentó un recurso de revisión ante un Tribunal Colegiado, insistiendo en la petición de amparo.

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